Valentin y la cura antiestrés

Si señores, hoy es el día que miles que de infieles estaban esperando, el día en el que el cursi es el rey y donde el dinero puede comprar cualquier tipo de extraño bien en busca de un poco de amor. Os lo garantizo, los regalos que hoy se hagan llenan estanterías porque la mayoría de ellos resultan cuanto menos estrafalarios en cualquier otro día del año. Pero tranquilos, si tenéis pareja, hoy mojáis. Aunque tu regalo sea un kiwi pintado de rosa... hoy mojas. Aunque le regales un tanga con sabor a fresa y la cara de ronaldinho en el frontal... hoy mojas. Incluso si le regalas un libro de como tratar al balón firmado por valdano... pero que cojones de degenerado hijodeputa espera mojar con semejante regalo... es el día de San Valentín no el de "perdonemos todo al demente".

Bueno el caso es que hoy nos disfrazamos influidos por el Corte Inglés para sumergirnos sin mirar en la marabunta que es el amor, eso sí, aviso para navegantes, los que no tengáis regalo ya preparaos para otro tipo de marabunta e iros acostumbrando a la zambomba que lo más femenino que vais a tocar de vuestra pareja son los pelos que deje en la ducha después de depilarse para quedar con sus compañeros de trabajo.

Dicho esto, os lo confieso, no tengo pareja. Sí, hoy no tengo nadie con quien compartir este especial y capitalista día. Incluso mi compañero de Blog Alexandros tiene un compromiso esta tarde y yo aquí compuesto y sin novia... y esto me hace sentir tan vacío... tan aburrido... tan sólo... tan... increíblemente libre y sin estrés. Porque seamos serios, este día es para rendir culto al estrés. ¿Quien no tiene estrés por tener que pensar por dos? Tienes que pensar en cuanto quieres a tu novia y expresárselo a ella. Si os lo aseguro, yo hubo un tiempo que tuve novia y cometí el error de no acordarme de San Valentín... todavía ya siendo sólo "amigos" me lo sigue recordando. Y como no vamos a sentir estrés si estás casi obligado pase lo que pase, haya un terremoto o un huracán, te exploten en el trabajo o quieras desgastar tus testículos esa tarde, a sentirte bien, fresca y segura cual anuncio de compresa y compartas esta alegría con tu pareja. Luego pasa como en Semana Santa, te flajelas un día por tus pecados (en este caso el pecado es tener pareja) y el resto del año te conviertes en Satanás.

Hoy llamaré a una chica en la que llevo interesado un cierto tiempo para preguntarle porqué no me responde a los mensajes... le abriré mi corazón y seguramente ella ni se inmute, no me importa pero de este modo estaré rindiendo culto a ese santo tan comercial, San Valentín que llena nuestros corazones de amor y mentiras con fecha de caducidad. Empacharos a bombones y disfrutad con la fragancia de las rosas, alguno de vosotros tendréis suerte y hoy disfrutareis de los placeres de la carne pero recordad, el amor desmenuzado en reacciones químicas es apenas indistinguible de lo que te ocurre al pillarte el pezón con la puerta de modo que vigilad donde metéis los pezones. Saludos

P.D:Os quiero, sobre todo a ti María aunque tu ya tienes otro amor sabes que siempre te llevaré en mi corazón.